miércoles, 23 de febrero de 2011

No sé.

Iba a escribir, pero mejor me voy a la conchetumare.

martes, 1 de febrero de 2011

Es como el suelo que espera la lluvia para regocijarse, como espera a las gotas para jugar a atraparlas con sus dedos de tierra.
Es como el hombre que espera el atardecer para comtemplar su magnífica hermosura. Así como espero ver tu carita.

Es como esperar un día determinado y ver que llega.
Es reconfortante el extrañarte.
Es una sensación especial que me recorre, que me envuelve.
Que me gusta.
Que me incita a aprovechar cada segundo de vida.
De esto que puedo llamar vida desde que estoy a tu lado.

Pisando hojitas cafés y tiritando con cada beso.
Con cada risa, con cada juego y cosquilla.

Con cada vez que te extraño y cada vez que te arropo y beso mientras duermes.

No te preocupes nunca, yo seré siempre tu guardián, en la cama y fuera de ella, en una realidad hostil o en esas horas que nos miramos igual que el primer día, pero con muchas más ganas, amor, risas y felicidad cada segundo.